Te juro que te extraño. Pasan quince días de ausencia y lo extraño. Por supuesto que cuando llega y antes de decir: "Hola hijo, ¿cómo estas?"... grita por los pisos sucios. Es así como me afecta sus viajes largos. En mi cuerpo algo extraño, lo extraño. "Hola papá, ¿cómo estas?"
sábado, 12 de enero de 2008
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2 comentarios:
Cómo la distancia nos ayuda a darnos cuenta de las cosas que nos importan. Por eso me gusta viajar para acomodar las ideas. Por lo menos así lo veo yo! Sic, sic.
Besos grandes!
este es triste
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